¡Todos para uno y uno para todos!
Dentro del modelo de la calidad de vida y respetando los derechos de las personas con diversidad funcional intelectual es necesario cubrir este espacio, el cual es un eslabón clave para la inclusión en la sociedad. La realización de actividades de ocio contribuye a aumentar la autoestima de las personas, ya que favorece el bienestar emocional, habilidades sociales y relaciones personales, autonomía y relaciones positivas con el entorno.
Desde esta área se ofrecen recursos y apoyos que atiendan a las necesidades reales que presenta el colectivo para disfrutar así del ocio de una manera autónoma. Para ello, trabajamos en cuatro líneas de actuación: deporte, ocio cultural, ocio recreativo y viajes de fin de curso.
Los usuarios y usuarias tienen una participación activa para poder decidir según sus intereses, y entre todos hemos organizado estas cuatro líneas de actuación en seis “clubs”.